CELEBRA VICTORIAS PARCIALES
…Cuando los constructores completaron la fundación del Templo, los sacerdotes… tocaron sus trompetas; y… golpearon sus platillos para alabar al Señor… cantando esta canción: Él es bueno, y su amor y misericordia hacia Israel durarán para siempre… Esdras 3:10–11
Los israelitas tuvieron el sueño de reconstruir el templo. Fue una tarea enorme. Después de mucho trabajo y frustración, finalmente terminaron los cimientos. Ni siquiera habían comenzado los muros, sin embargo, tuvieron una gran fiesta. Podrían haber dicho: “Olvídalo. Nunca vamos a terminar”, sino que celebraron la pequeña victoria.
Todos tenemos cosas en nuestra vida que están incompletas. Hemos progresado un poco, pero el sueño no se ha cumplido, un problema no ha cambiado. Con demasiada frecuencia esperamos la victoria total para celebrar. “Cuando salga de la deuda, estaré agradecido”. Pero la clave para que se cumpla es no permitir que su finalización retenga a su rehén de acción de gracias. Celebra victorias parciales en el camino. Cuando pagues una tarjeta de crédito, celebra lo que Dios ha hecho. Cuando pasas la prueba de estar agradecido por las cosas pequeñas, Él lanzará cosas grandes en tu vida: más favor, más sanación, más fuerza.
Una oración para hoy
Padre, gracias por tu fidelidad, amor y misericordia en mi vida. Gracias por las victorias parciales que me has dado, y sé que estás trabajando para completarlas. Ayúdame a seguir agradecido y ver cada promesa cumplida. En el nombre de Jesús, amén.
Guillermo Pacheco