PROMOCIÓN

PROMOCIÓN

Porque el SEÑOR no ve como el hombre ve; porque el hombre mira la apariencia exterior, pero el SEÑOR mira el corazón… 1 Samuel 16:7

Dios no elige la forma en que la gente elige. La gente mira hacia afuera. Dios mira el corazón. Dios sabía que si podía confiar en que David cuidaría de las ovejas y sería fiel cuando las cosas no iban como él quería, podía confiar en que él cuidaría de su pueblo. David pasó de ser un pastor a ser el próximo rey. Nadie votó por él. Esta no era una democracia. Si lo hubiera sido, no habría recibido un voto. Nadie en Israel sabía quién era en ese momento. Su padre ni siquiera creía en él.

Cuando Dios está listo para promocionarte, no vota. No comprueba a quién le gustas, quién es para ti o qué tan popular eres. No es un voto. Es una cita. La promoción no proviene de las personas. Viene del Señor. Cuando llegue el momento de ser ascendido, ninguna persona, ningún mal descanso, ninguna decepción y ningún enemigo podrá detenerte. Dios tiene el único voto. Él tiene la última palabra.

Una oración para hoy

Padre, gracias porque no estás limitado a verme como me ven otras personas. Gracias porque ves mi corazón y conoces mi fidelidad hacia ti. Creo que la promoción viene de ti y tú tienes la última palabra. En el nombre de Jesús, amén.

Guillermo Pacheco