TIENES UN DEFENSOR
…Nunca pecó, ni engañó a nadie. No tomó represalias cuando fue insultado, ni amenazó con venganza cuando sufrió. Dejó su caso en manos de Dios, quien siempre juzga con justicia… 1 Pedro 2:22–23
Cuando Jesús estuvo en la tierra, dio vueltas haciendo el bien, sanando a los enfermos, levantando a los caídos. No hizo nada malo, pero fue mal entendido, criticado, menospreciado, ridiculizado y acusado falsamente. ¿Cómo respondió Él para proteger su reputación? Lee las Escrituras de hoy. No perdió el tiempo tratando de demostrar a sus críticos que era el Hijo de Dios. Él seguía siendo el mejor, confiando en su padre para resolver sus casos.
Todos tenemos personas que vienen en contra de nosotros y hacen comentarios negativos sobre nosotros. Podemos pasar demasiado tiempo preocupándonos por lo que piensan, tratando de defendernos y demostrarle a la gente quiénes somos. ¿Por qué no pones tu reputación en manos de Dios? Dijo que te defenderá y que te reivindicará mucho mejor de lo que tú puedes reivindicarte. No tienes que tomar represalias, desquitarte, demostrar que eres una buena persona o convencerlos de que cambien de opinión. Dios puede hacerlo mejor que tú.
Una oración para hoy
Padre, gracias por el ejemplo que Jesús mostró en su respuesta a los insultos y falsas acusaciones. Gracias porque no tengo que perder mi tiempo y energía tratando de demostrar quién soy o cambiar lo que otros piensan de mí. Eres mi defensor En el nombre de Jesús, amén.
Guillermo Pacheco