EL PODER DE «YO SOY»
…Un hombre estará satisfecho con el bien del fruto de sus palabras… Proverbios 12:14
Ya sea que te des cuenta o no, durante todo el día el poder del «Yo soy» está en juego en tu vida, porque lo que sea que siga a esas dos simples palabras siempre vendrá a buscarte. Cuando dices: «Soy muy desafortunado», estás invitando a las decepciones. «Tengo tanto sobrepeso». Las calorías vienen a buscarte. Es como si les estuvieras dando permiso para estar en tu vida. Es por eso que debes tener cuidado con lo que sigue al «yo soy» y no ejercer su poder contra ti.
La buena noticia es que puedes elegir lo que sigue al «yo soy». Levántate por la mañana e invita cosas buenas a tu vida. «Estoy bendecido. Soy fuerte. Soy talentoso. Soy sabio. Soy disciplinado. Estoy concentrado. Soy próspero”. Cuando hablas así, el talento es convocado por Dios Todopoderoso: «Ve a buscar a esa persona». ¡La salud, la fuerza, la abundancia y la disciplina comienzan a encaminarse hacia ti, y no te cuesta nada!
Una oración para hoy
Padre, gracias porque mis palabras tienen poder creativo, y puedo usar el poder de «yo soy» para convertirme en lo que Tú dices que soy. Gracias porque me llamas una obra maestra y tu posesión más preciada. Usaré mis palabras para invitar cosas buenas a mi vida. En el nombre de Jesús, amén.
Guillermo Pacheco